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El trabajo en equipo es la asignatura pendiente y constante a la que se enfrentan todas las organizaciones hoy en día.

Da igual si es una organización empresarial, asociación no lucrativa o club deportivo. El trabajo en equipo, por encima del individual, tiene la fuerza de poder conseguir cuotas de Éxito mucho mayores que de forma individual.

 

El Cuento de la Carpintería

Cuentan que había una vez, en una pequeña carpintería, una asamblea un tanto peculiar. Pues estaba formada por herramientas cuyo objetivo era el de arreglar las diferencias que entre ellas habían ido surgiendo con el tiempo.

Primeras discusiones

El martillo ejerció de maestro de ceremonias por iniciativa propia, pero automáticamente, el resto de asistentes le increparon y le invitaron a renunciar a tal cargo…

¿Por qué causa?…

Porque era muy ruidoso y además se pasaba el tiempo golpeando aquí y allá.

El martillo aceptó su culpa y el rechazo por parte del resto de las herramientas. Se disculpó por su forma de actuar, pero solicitó que también fuese expulsado el tornillo, argumentando que había que darle muchas vueltas para que sirviese para algo.

Delante de este ataque, el tornillo también aceptó la realidad de su situación para ser útil y aceptó abandonar la reunión. Acto seguido, pidió que el papel de lijar, por su aspereza y trato con los demás y debido a sus fricciones, también fuese expulsado.

Al papel de lijar le pareció bien, y sólo puso una condición a su marcha: el metro debía ser expulsado porque siempre estaba midiendo a los demás, como si él fuese el único perfecto.

La Interrupción del carpintero en la reunión 

En ese mismo momento se oyó el ruido de la puerta que alertó a las herramientas. El carpintero acababa de llegar, y después de ponerse su delantal de cuero, empezó a trabajar.

Usó el martillo, el papel de lijar, cogió el metro y usó unos tornillos.

Al cabo de unas horas, la tosca madera inicial se había convertido en un bonito mueble. Y el carpintero, dejando su delantal encima del banco, se dio la vuelta y cerró la puerta tras de sí.

Trabajo en equipo

La Lección de la Sierra

Al volver la carpintería al silencio de la solitud, la asamblea se reanudó para deliberar. Y fue entonces cuando la sierra tomó la palabra y dijo:

– Señores, ha quedado demostrado que tenemos defectos, pero nuestro carpintero trabaja con nuestras cualidades. Esto es lo realmente valioso. Así que dejemos de centrarnos en nuestros defectos y concentrémonos en el valor de nuestros puntos fuertes y el trabajo en equipo.

Durante unos instantes todos quedaron en silencio, mirándose unos a otros, hasta que la sierra retomó sus palabras:

– Por lo tanto, debemos apreciar la fuerza del martillo, la capacidad de unión del tornillo, que además aporta solidez. El papel de lijar es especial, permite afinar y limar las asperezas, y eso, junto con la precisión y exactitud del metro ha hecho posible que un equipo que, hace unas horas, estaba atacándose sin piedad pudiera construir un mueble de calidad y tan bonito como el que tenemos aquí delante.

En ese momento, el sentimiento de ser capaces de producir muebles de calidad hizo que, además de sentirse orgullosos cada uno de sí mismos, se miraran y apreciaran la fortaleza que obtenían al trabajar juntos.

Trabajo en equipo

Trabajo en Equipo: Reflexión

¿Te ha gustado el cuento?

Realmente con las personas pasa exactamente lo mismo, sólo debes observar y lo podrás comprobar.

Es muy habitual que en grupos de trabajo se busquen a menudo los defectos de unos sobre los otros, y entonces, el entorno y la situación que se vive se vuelve tensa y negativa para todos.

En cambio, cuando nos enfocamos, de forma sincera, en las virtudes o puntos fuertes de los demás es cuando florece lo mejor de cada uno y se alcanzan resultados increíbles.

Es muy fácil encontrar defectos, cualquiera puede hacerlo. Pero encontrar cualidades y virtudes, esto, es mucho más difícil y requiere de actitud.

Como muchas veces digo “es más fácil encontrar una pequeña pajita en ojo ajeno que una viga de acero de 20 metros en el propio”.  🙂

Si te ha gustado el cuento, compártelo y empieza a mirar a tu equipo con otros ojos, verás que te será más fácil conseguir tus metas.

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